sonrisa limpia, simple, que se hace querer. charlas que terminan siempre en una risa, cuentos que buscan levantarte, que intentan buscarle un punto para que aparezca algún color, distracción, algún vuelo de una realidad no siempre ideal. que la inocencia te valga.
andar por ahí, abriendo una puerta, contando alguna cosa, poniendo en juego la credibilidad, la confianza. desafíar amarguras y murallas, esa capacidad de cerrarse en círculos cada vez más chicos. intentar al menos hacer círculos nuevos. que la inocencia te valga.
antes que creas que lo imposible no es verdad, que la inocencia te valga.
9 comentarios:
Habrá que ver para qué nos tiene que valer la inocencia.
Creo que, de lo inocente que soy, cambiaron mi inocencia por otra.
O tal vez, no.
Hace un tiempo me acorde de mi inocencia, casi desvalije la casa, pero nada ni un rastro ni una carta de despedida. Ayer vi a mi sobrinito reirse a carcajadas mientras jugaba con mi perro. En ese instante, dejé buscar y me uni a ellos.
que la recuperemos primero
y despues, que nos valga
jaja . ese inocente muchas veces fui éu!! tampoco Flanders! pero como siempre digo, sostengo mi creencia acerca de la contradicción. soy el más increíblemente inocente, y también el viejo vizcacha en persona.
De todas formas siempre resulta ser cultural la cosa.
salú.
p.d. alvarez puedo creer junto con ud. en que las inocencias se cambian, pero siguen siendo inocencias al fin. creo que valen para seguir viviendo en el mundo que creemos vivir... no sé si es bueno o malo, sólo sé que es.
anfitrión buena forma de reencontrarse con la que jugaba a las escondidas. ella nos encuentra a nosotros, siempre, aunque una crea que la haya superado, ella vuelve y se pone a jugar... si hay ganas de sumarse al juego mucho mejor.
malcontenta a veces está, como decía jugando a las escondidas. en este caso creo que está, débil quizá, pero está.
rolando dejeme decirle que ud. no es el único especimen que posee tal característica. siempre que resulte, tendrá sentido, cuando no, se meditará al respecto... al final para algo termina resultando.
Desde el blog de Anfitrión, he llegado al tuyo... Me has recordado con tu post esa canción que versa "recuerdos de tanta inocencia, que tan poco tiempo duró"... todos la tenemos guardada en algún vestigio de nosotros, sólo hay que animarse a buscarla...y así durará tanto como se lo permitamos. Mucho gusto leerte!
el negocio es simple,
uno cambia inocencia por verdades, por aprender, por realidad
el negocio es complicado,
uno trata de recuperar la inocencia, evadir la realidad, cambiar las verdades, y enseñar
yo creo que la inocencia es como un juego de cajitas una mas grande que la otra o como las mamushkas: cuando creés que la tenés reeeeclara, que la tenés atada, Zaz! te das cuenta que no, que fuiste ingenua y había otra cosa, y así sucesivamente,ad infinitum. Ahora...renegamos por no poder alcanzar "la verdad" o nos acostumbramos y disfrutamos de que siempre haya algo nuevo?!
estrellada muchas gracias por tal visita entonces. spuestos a encontrarla y a disfrutarla (aunque traiga algunas penas x)
vinilica buena ecuación, sólo que, creo, cuanto más cerca se está de la inocencia, más entiende una que tiene más por aprender que por enseñar.
magui ud. lo ha dicho, ésto no se trata más que una nueva vuelta en dónde no llegué a nada escondido sino a una nueva muñeca. pero creo que vale, por eso sigo jugando.
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